Las líneas navieras parecen haber sobreestimado el equilibrio entre la oferta y la demanda en los últimos meses, lo que ha provocado un exceso de capacidad en las principales rutas marítimas. A pesar de la fuerte demanda, especialmente entre las rutas Asia-Norteamérica y Asia-Europa, las líneas navieras han desplegado más capacidad de la necesaria. Según indica la consultora Sea-Intelligence, la capacidad en el comercio transpacífico aumentó un 19% en el tercer trimestre de 2024 en comparación con el segundo trimestre, lo que ha contribuido a una caída significativa en los fletes marítimos.
Anteriormente, las líneas navieras utilizaban la estrategia de “blank sailings” (cancelación planificada de viajes) para equilibrar la oferta y la demanda, pero el exceso de capacidad actual indica la necesidad de tomar medidas más agresivas.
Los fletes marítimos conocidos como “spot” han disminuido notablemente, con caídas del 7% en las tarifas de Shanghái a Róterdam y del 3% en las de Shanghái a Los Ángeles solo en las últimas semanas.
Los expertos de la industria sugieren que, a menos que las líneas navieras aumenten las cancelaciones de viajes, las tarifas seguirán erosionándose rápidamente. Esta situación pone de relieve el delicado equilibrio que esta industria deben mantener entre la eficiencia operativa y la adaptación a la demanda fluctuante.
La República Dominicana no esta exenta de los efectos que generará esta situación, por lo que los importadores desde el Lejano Oriente deben estar atentos a las variaciones de las tarifas ofrecidas, pero también a una potencial reducción de capacidad y disponibilidad.
El exceso de capacidad no solo presiona las tarifas, sino que también afecta la rentabilidad de los las líneas navieras, lo que podría dar lugar a ajustes de tarifas más volátiles en los próximos meses.
El aumento de la capacidad en medio de un récord de importaciones de contenedores en EE.UU. a principios de este año agrava aún más la situación. Ante la incertidumbre del mercado, las líneas navieras deberán tomar decisiones decisivas, como reducir la capacidad o cancelar servicios de temporada alta para restaurar la estabilidad.
